Héroes y villanos

Los héroes en la historia de México, por lo menos en la oficial, son superiores a los dioses griegos porque nunca cometieron errores, todo lo que hicieron fue perfecto y pensado siempre en la patria, en ayudar al país, no tenían rencores, eran impolutos, vamos, poco les falta para decir que defecaban bonito. En cambio, los villanos son peores que el diablo y todas sus huestes juntas...todo lo hecho por esos individuos que no merecen siquiera haber nacido fue por avaricia y egoísmo, porque el mal estaba intrínseco en ellos...y así nos podemos seguir con muchos adjetivos.

Sin embargo, es triste decirlo pero la historia está mal contada. Hace algún tiempo leí una frase que decía: "hay dos historias: la oficial y la verdadera", cosa muy cierta, y esto es muy común en todas las naciones.
Por ejemplo, cuando Napoleón llevó a la cima de Europa a Francia lo vitoreaban como un gran héroe y, sin embargo, cuando perdió en Waterloo se le defenestró. De hecho la columna de Verdome fue erigida por el corso para conmemorar la victoria en Austerlitz, pero durante los sucesos de la Comuna de París se le derribó por considerarla un monumento a la barbarie y al militarismo, poco después se le edificó de nuevo. Por mucho tiempo a Napoleón no se le daba el lugar que le correspondía en la historia de Francia, pero con el tiempo lo regresaron, no al pedestal que tuvo alguna vez pero si a su lugar correspondiente en la historia.

Pero volviendo a México, los héroes y villanos están enfocados dependiendo el gobierno en turno, sus intereses e ideologías. Primero que nada creo que sería bueno definir que es un héroe, ¿es aquel que hace mucho por la patria, el que gana una batalla, el que pelea por el país a cualquier costo, el martir, el que generó todo un proceso de cambio, el que estabilizó económicamente a la nación? Si ese es el parámetro Agustín de Iturbide lo fué porque consumó la Independencia de México; Antonio López de Santa Anna defendió Tampico ante el embate español que comandaba Barradas, y también Veracruz ante los franceses; Porfirio Díaz no sólo pacificó el país, sino también la económia, logrando que la ultima década de su gobierno crecieramos al 11% de forma sustentable no igualada ni por el priísmo en su mejor momento; Miguel Miramón peleó como uno de los cadetes que defendieron el castillo de Chapultepec.

Ahora viene la parte de definir a los villanos, ¿los que se doblegaron ante cualquier nación, los que vendieron la patria, los apoyaban a la monarquía, al clero, los que se convirtieron en dictadores, los que asesinaron a sus enemigos? Ahí entrarían Benito Juárez al firmar el tratado Mc Clean - Ocampo, que cedía a perpetuidad el Itsmo de Tehuantepec y que sólo por la negativa del congreso estadounidense no se logró, si no ahorita los tendríamos todavía por acá, si no es que tuvieran todo el sur. Además gobernó durante catorce años ininterrumpidos al país usando toda clase de artílugios legaloides para seguir en el cargo. Sólo su muerte lo quitó de la silla; Miguel Hidalgo porqué se rebeló contra los que gobernaban que en ese entonces dirigía Pedro de Garibay, y no contra Fernando VII, rey de España lo cual quiere decir estrictamente que no buscaba la independencia de un país que se llamaría México, más bien algo asi como la Comonwealth, independencia pero con sumisión a la corona española; José María Morelos en los famosos "Sentimientos de la Nación" sostenía que la religión católica debería de ser la única sin tolerar otras confesiones, no demostrando nada de laicismo. Y no podemos decir que no lo sabía, la revolución francesa ya había sucedido y sus ideales corrían por el mundo; Venustiano Carranza mandó asesinar a todo aquel que no lo reconociera como el jefe supremo, eliminando así a mexicanos valiosos como Felipe Ángeles.

Hay personajes que son considerados héroes más por la muerte que tuvieron que por lo que hicieron en vida, como por ejemplo Francisco I. Madero. Si bien él convocó a una revolución para sacar del poder a Díaz, lo cierto es que no fue ni el único ni el primero en hacerlo, los Flores Magón ya lo habían planteado, por ejemplo. Inicialmente pedía que Porfirio Díaz dejara la presidencia, pero vista la negativa a hacerlo pidió que por lo menos se eligiera al vicepresidente, cosa negada de igual forma, obligandoló a convocar en su Plan de San Luis al levantamiento armado. Pero en el se ve su poca pericia táctica, ¿a quién se le ocurre dar el día, mes y hora para el inicio de las hostilidades? Si el movimiento funcionó fue porque la gente estaba hastiada de las condiciones que existían, fueran económicas o políticas, logrando el apoyo masivo.
Su muerte tan trágica fue lo que lo ensalzó, pero fue por un error suyo. Durante la "decena trágica" su hermano Gustavo le llevó a Victoriano Huerta con pruebas fehacientes de que estaba con los alzados, pero Francisco lo perdonó y le dió una oportunidad de serle leal, cosa que en menos de vienticuatro horas le demostró al arrestarlo y derrocarlo. Pero hay cosas que no se tocan, como su continuísmo del porfirismo al pedirle al José Yves Limantour que siguiera siendo el secretario de Hacienda, cosa que no aceptó aquel y que la mitad del gabinete fuera de origen porfirista. No tenía un verdadero proyecto de nación que le permitiera responderle a todos los que lo apoyaron y sólo consiguió que se rebelaran contra él, como fue que hizo Emiliano Zapata cuando proclamó su Plan de Ayala. No fue un buen presidente, sino un hombre con buena intenciones pero limitado. Aun así está en el altar de los grandes héroes del la patria.

Caso contrario con Maximiliano de Habsburgo a quién la historia oficial se le dá un trato sumamente injusto. No se dice tan claro que era un hombre que aspiraba en segundo grado al Impero Austrohúngaro, así que no podemos decir que era un cualquiera. Tampoco que en cuanto llegó juró la constitución de 1857 causando la molestia del clero porque él tenía ideas liberales. Además tenía un verdadero proyecto de nación, como por ejemplo convertir los estados en departamentos (muy a la europea) y aumentarlos a cincuenta, esto con dos propósitos, evitar los cacicazgos y haciéndolos más manejables, entre muchas otras cosas. En muchas ocasiones buscó a Juárez para entrevistarse con él y buscar una solución a la guerra civil que se vivía, ninguna de las tantas cartas que le envió fue contestada. Podemos decir que quería unir al país, pero la intransigencia de los liberales lo impidió. Y otra cosa, muchos de los indígenas lo apoyaron. Así es, en Oaxaca y algunos lugares del norte comunidades completas de indígenas apoyaron al ejército francés. Murió injustamente aun y cuando se le pidió a Juárez clemencia, pero este, usando una ley que venía de uno de los gobiernos de Santa Anna y que condenabá a todo aquel, fuera mexicano o extranjero, a ser fusilado si apoyaba algún movimiento contra el gobierno, la aplicó. Aun estando muerto se le trató mal al retardarse casi seis meses su envio a Europa, demostrando su desprecio a un hombre que, en realidad fue engañado por los conservadores mexicanos.

Estos son sólo dos ejemplos de hombres que la historia oficial a mostrado diferente a como verdaderamente eran, me podría seguir con Juárez, Carranza, Iturbide, Santa Anna, Gómez Farías, Díaz, Arista, Miramón, Hidalgo, Morelos, Allende, entre muchos otros, pero a ellos los tocaré en otra ocasión. Tristemente no se les ha dado la real dimensión a todos los que han sido parte, para bien o para mal, de la historia de México, sólo se magnifica a quienes se le considera héroes, dandole trato de dioses, y olvidando, relegando y defenestrando a aquellos que son considerados villanos.

Pero hay algo que no deja de ser irónico, los dos grande símbolos patrios, la bandera y el himno, se les deben a dos de los grandes "villanos" de la historia: Agustín de Iturbide y Antonio López de Santa Anna, respectivamente, demostrando con ello nuestra gran contradicción como nación.